Padre de las misericordias, que viviendo la Sinodalidad nos vayamos transformando en la imagen de tu Hijo y así reflejemos el rostro de nuestros carismas, para construir una Iglesia donde todos seamos sostenedores y colaboradores del Cuerpo Místico de Cristo.
Amén
Hnas. Clarisas Capuchinas de Salvatierra, Gto. México.