Mucho más que oír será nuestro escuchar:
que palabras vanas se las lleva el viento.
Y entrar en palabrerío sin acierto
fuera saca del camino sinodal.
Valentía se nos pide en el hablar
en camino al mejor discernimiento,
el propio corazón al descubierto
y el corazón de los otros encontrar.
El encuentro logrado no es sin nombre,
ni anónimos se quedan los esfuerzos,
pues que en medio tenemos Quien asombre.
Del Espíritu llega aquel refuerzo.
Y a Él le suplicamos que descombre
lo que dentro tenemos de retuerzos.
Pedro Jaramillo Rivas (Guatemala)